Si le han diagnosticado una enfermedad autoinmune, su salud bucal no siempre es lo primero en lo que piensa.
Pero, así como las enfermedades autoinmunes afectan su salud general, también afectan su salud dental. Estos son cuatro pasos que puede tomar para ayudar a proteger su boca si tiene una enfermedad autoinmune.
Si tiene una enfermedad autoinmune, su dentista es una parte importante de su equipo de atención médica.
El dentista y el higienista le ayudarán a mantenerse al día con lo siguiente:
Asegúrese de que su dentista e higienista conozcan su enfermedad para que puedan ayudarle a determinar sus mejores opciones de citas y proporcionarle una atención óptima.
Las enfermedades autoinmunes aumentan el riesgo de problemas de salud bucal, como caries y enfermedad de las encías. Es importante formar buenos hábitos de higiene bucal con regularidad en casa.
Elimine la placa cepillándose al menos dos veces al día y usando hilo dental al menos una vez al día para ayudar a combatir mayor riesgo de problemas dentales.
Algunas enfermedades autoinmunes dificultan el cepillado y el uso del hilo dental. Si su enfermedad afecta el sistema nervioso central, como la esclerosis múltiple, o a las articulaciones, como la artritis reumatoide, puede hacer que el movimiento sea más difícil. El trastorno de la unión temporomandibular (TMJ, por sus siglas en inglés), que puede ser un síntoma de algunas enfermedades autoinmunes, afecta la mandíbula y puede dificultar la apertura de la boca.
Si sus síntomas dificultan el cepillado, asegúrese de comentar estos problemas con su dentista y su médico. El equipo de cuidado de la salud puede sugerirle tratamientos como analgésicos, antiinflamatorios, férulas orales, protectores bucales o inyecciones de corticoesteroides.
Hable con su dentista acerca de las técnicas de cepillado y uso del hilo dental que pueden adaptarse a sus necesidades. Estos son algunos remedios simples que podrían ayudarle con su rutina de atención de la salud bucal en casa:
La sequedad en la boca es un síntoma de muchas enfermedades autoinmunes. La saliva ayuda a enjuagar los dientes y controlar la población de bacterias en la boca, por lo que tener menos significa que es más propenso a caries y otros problemas de salud bucal. Con el tiempo, la boca seca causa problemas en los dientes y las encías.
Las armas más importantes en la lucha contra la boca seca son:
Si experimenta sequedad en la boca, asegúrese de comentarle sus síntomas a su dentista.
Una dieta que combate la inflamación puede ayudar a reducir las respuestas inflamatorias asociadas con las enfermedades autoinmunes. Una dieta antiinflamatoria suele limitar las carnes procesadas, las grasas saturadas, los azúcares refinados, la sal y la harina blanca, al tiempo que incluye muchos cereales integrales, verduras de hoja verde, bayas, aceite de oliva, frijoles, té verde, frutos secos, pescado y aves de corral.
Una dieta de protocolo autoinmunitario (AIP) es una dieta muy restrictiva que se centra en eliminar todos los alimentos inflamatorios durante 30 a 90 días. Luego, los alimentos se vuelven a introducir lentamente en la dieta de uno en uno para ver cómo responde el cuerpo.
Si tiene una enfermedad autoinmune, puede beneficiarse de la orientación de un nutricionista matriculado. Junto con la dieta, debe incorporar otras opciones de estilo de vida saludable que tengan un impacto positivo en la respuesta inmunitaria de su cuerpo, como reducir el estrés, dejar de fumar, hacer ejercicio con regularidad y dormir lo suficiente.
Última actualización: 1 de diciembre de 2022
La información sobre salud bucal en este sitio web está destinada únicamente a fines educativos. Consulta a un dentista licenciado u otro profesional de la salud para cualquier pregunta relacionada con tu salud bucal.