Los problemas de salud dental en los pacientes con enfermedad de Alzheimer pueden conducir a dolor, comportamiento incontrolable y necesidad de un tratamiento dental extensivo. Lamentablemente, sus necesidades dentales a menudo se pasan por alto.
- Los problemas de salud mental del paciente pueden provocar negligencia dental no intencional.
- Los medicamentos pueden causar sequedad bucal crónica, y la reducción del flujo saludable de saliva puede provocar caries.
- Los pacientes y sus familias pueden perder el contacto con el dentista del paciente porque están enfocados en otros problemas de salud.
Una buena salud dental puede hacer que comer y digerir los alimentos sea más fácil para un paciente con enfermedad de Alzheimer, lo que mejora la calidad de vida general. Si usted es el cuidador de alguien que sufre de la enfermedad de Alzheimer, aquí se encuentran algunos consejos y técnicas para ayudar a que su ser querido mantenga una buena salud bucal.
- Cepíllele los dientes dos veces al día. Para que la limpieza dental sea más fácil, busque un cepillo de dientes que su ser querido pueda manejar y que también sea fácil de usar si necesita ayuda. Un cepillo de dientes eléctrico puede ser una buena opción, si a su ser querido no le molesta la sensación de vibración. Si la pasta dental hace que el proceso sea más difícil, omítala. Pídale al dentista de su ser querido un gel con flúor o enjuague. El flúor ayuda a mantener el esmalte fuerte.
- Use hilo dental una vez al día. Un sujetador de hilo dental puede facilitar el uso del hilo dental para las personas que no tienen una buena destreza con los dedos. Los palillos comunes y especiales pueden ser una alternativa adecuada si su ser querido se aprieta los dientes. También puede consultarle al dentista acerca del uso de una solución antimicrobiana para proteger las encías de su ser querido.
- Limpie la boca y la dentadura postiza después de cada comida. Algunos pacientes con enfermedad de Alzheimer tienen dificultad para tragar por completo. Haga que su ser querido se enjuague después de cada comida para ayudar a eliminar las partículas de los alimentos. También debe quitarse la dentadura postiza para limpiarla después de cada comida. Asegúrese de usar un cepillo de dientes con cerdas suaves, para cepillar suavemente las encías y el paladar.
- Inspeccione visualmente los dientes y las encías de su ser querido una vez al mes. Pregúntele a su dentista si hay algún punto problemático al que deba prestar más atención. Si las encías sangran o están inflamadas o enrojecidas, su ser querido puede tener enfermedad de las encías y tendrá que consultar al dentista.
- Programe visitas regulares al dentista. Debe mantener una lista actualizada de los medicamentos de su ser querido para que los dentistas y otros trabajadores del cuidado de la salud puedan consultarla fácilmente. Programe una cita con el dentista de inmediato si su ser querido tiene dificultad o dolor al masticar o presenta mal aliento, lo cual puede ser un signo de infección.