La primera encuesta de Delta Dental sobre salud bucal en personas mayores reveló que el 72% de los estadounidenses de 50 años o más desearía haber cuidado mejor sus dientes durante la juventud, pero muchos continúan descuidándolos. Como la salud bucal está vinculada a la salud cardíaca, cerebral y mental, los dentistas alientan a seguir la “regla 2-1-2”.
Los estadounidenses de 50 años o más reconocen la importancia de la salud bucal, pero no necesariamente toman las medidas para darle prioridad como deberían, concluye el Informe de salud bucal en personas mayores de Delta Dental: arrepentimientos, obstáculos e impacto en relación al cuidado bucal en estadounidenses mayores. El ochenta por ciento de los estadounidenses mayores no va al dentista con la frecuencia recomendada actualmente, a pesar de calificar como el tercer mayor arrepentimiento relacionado a la salud física el hecho de “no cepillarse ni usar hilo dental con mayor frecuencia”. Nuestra capacidad de sonreír sin sentirnos juzgados por los demás tiene un impacto significativo en nuestro bienestar social. El estudio revela que dos de cada cinco personas mayores (40%) sonríen menos que cuando eran más jóvenes debido al deterioro de su salud bucal o la apariencia de sus dientes.
Por lo general, falta comprensión de la conexión que existe entre la salud bucal y la salud general entre los estadounidenses mayores. Dos de cada tres personas (66%) nunca han analizado sus consultas al dentista o su salud bucal con el proveedor de atención primaria, y más de la mitad (55%) afirma que nunca analizan su salud general o los medicamentos que están tomando con el dentista. Estas son brechas importantes a medida que el tratamiento de la salud física, mental y bucal se integra más para reflejar la conexión entre el cuerpo, la mente y la boca.
Es indispensable cerrar estas brechas para crear una sociedad más saludable, particularmente en lo que respecta a la población de personas mayores. “Las personas mayores se enfrentan a una crisis de salud bucal debido a desafíos únicos y obstáculos de acceso que tienen importantes consecuencias para la salud general”, sostiene Sarah Chavarria, Presidenta de Delta Dental. “Creemos que la atención médica es un derecho de todos, y es por ello que mejorar la calidad de la atención de la salud bucal y aumentar el acceso y los recursos para esta población desfavorecida y vulnerable es una prioridad para nosotros en Delta Dental”.
Obstáculos que impiden dar prioridad a la salud bucal
La encuesta reveló tres obstáculos principales para dar prioridad a la salud bucal entre los estadounidenses mayores:
- Falta de comprensión de la conexión que existe entre la salud bucal y la salud general.
- Acceso a la atención, incluidos transporte, tiempo y movilidad física.
- Emociones negativas asociadas con las consultas al dentista.
Identificar y comprender los obstáculos para la salud bucal de los estadounidenses mayores es el primer paso para abordar las necesidades y los recursos que hacen falta para ofrecer atención de calidad a esta población vulnerable. Un mejor mantenimiento del cuidado bucal preventivo es esencial para mitigar el riesgo de tratamientos potencialmente más invasivos y costosos en el futuro.
Consecuencias perjudiciales de separar la boca del cuerpo
La boca es una puerta de entrada al cuerpo, y las enfermedades que comienzan en dientes y encías pueden tener un impacto profundo y significativo en la salud general, el bienestar social y la calidad de vida. A pesar de esto, las conclusiones sugieren que la mayoría de los estadounidenses mayores podrían estar mejor informados sobre la conexión que existe entre la salud bucal y la salud general. De hecho, la mayoría no habla con los proveedores de atención primaria acerca de su salud bucal ni tampoco con el dentista acerca de su salud general o los medicamentos que toman.
Las conclusiones clave de la encuesta relacionadas con los estadounidenses mayores revelan que:
- Tres de cada cinco personas (61%) no sabían que la inflamación de las encías puede estar relacionada con la diabetes, la enfermedad cardíaca y un mayor riesgo de Alzheimer.
- Más de 8 de cada 10 personas (83%) afirmaron desconocer que la gingivitis es contagiosa y que se puede transmitir al besar.
- Dos de cada cinco personas (40%) no saben que las bacterias de la boca pueden diseminarse a otras partes del cuerpo.
“La boca y el cuerpo no son entidades separadas”, dice el Dr. Daniel Croley, Director Dental de Delta Dental. “Lo que sucede en la boca puede afectar a todo nuestro ser y viceversa. Por ejemplo, la inflamación de las encías, que puede incluir enrojecimiento, hinchazón o incluso sangrado, puede estar relacionada con la diabetes, la enfermedad cardíaca y un mayor riesgo de Alzheimer y, según nuestro estudio, más de tres de cada cinco estadounidenses mayores desconocían este hecho. Debido a que podemos diagnosticar y monitorear enfermedades a través de la atención de la salud bucal, las consultas regulares al dentista pueden ayudar a mantener dichas afecciones y enfermedades bajo control”.
Las comunidades de personas negras, indígenas y de color (BIPOC) enfrentan obstáculos desproporcionados para acceder al cuidado bucal
Como uno de los mayores obstáculos, el acceso a la atención es una inquietud particular. Las personas mayores de la comunidad BIPOC enfrentan dificultades desproporcionadas para acceder físicamente al cuidado dental. Uno de cada tres (30%) estadounidenses mayores de la comunidad BIPOC depende de otros medios de transporte, además de conducir en automóvil, para ir al dentista. El tiempo de traslado para los estadounidenses mayores de la comunidad BIPOC es más prolongado que para los estadounidenses mayores blancos: el 75% de los estadounidenses mayores blancos puede llegar al dentista en 30 minutos o menos comparado con el 65% de los estadounidenses mayores de la comunidad BIPOC.
A pesar de estos obstáculos físicos de acceso para estadounidenses de la comunidad BIPOC de 50 años o más, es mucho más probable que ellos relacionen la salud bucal con la salud física. El 50% de los estadounidenses mayores de la comunidad BIPOC hablan con el dentista acerca de su salud física, comparado con tan solo el 37% de los estadounidenses mayores blancos.
Esto puede sugerir que las diferencias culturales influyen en la forma en que las personas valoran esta conexión, o bien, podría revelar un tema más problemático, especula la Dra. Karen Horace, Gerente de Políticas dentales de Delta Dental: “Estadísticamente, muchos pacientes negros tienen menos acceso a profesionales de la salud que los pacientes blancos y personas de otras comunidades menos marginadas”, sostiene. “Por lo tanto, cuando consultan al médico o al dentista, es muy probable que muchos aprovechen la oportunidad para tratar todos sus problemas de salud”.
El vínculo entre la salud bucal, la salud emocional y la salud mental
La salud bucal no solo afecta nuestra salud general, sino también la forma en que nos vemos a nosotros mismos y nos conectamos con los demás. Casi dos de cada cinco (37%) estadounidenses mayores dicen que les preocupa ser juzgados negativamente por la apariencia de sus dientes, y casi tres de cada diez (30%) sienten que están descuidando la conexión con otras personas porque se sienten demasiado avergonzados como para reír o sonreír.
Las emociones también entran en juego al decidir programar una consulta con el dentista: el miedo y la ansiedad se interponen en el camino. El cuarenta y seis por ciento de los encuestados afirma que el principal motivo por el cual no consultan al dentista es porque no les gusta o temen ir. En especial, en la actualidad, la innovación en odontología ha hecho que la experiencia de sentarse en el sillón del dentista sea menos dolorosa y atemorizante. Y los controles periódicos con un dentista evitan que los problemas empeoren y requieran tratamientos invasivos.
Nunca es demasiado tarde para mejorar: seguir la “regla 2-1-2”
Dar prioridad a nuestra salud bucal, independientemente de la etapa de la vida en la que estemos, mejorará nuestra calidad de vida de varias maneras impactantes. Para los estadounidenses mayores (al igual que para los jóvenes) que buscan mejorar su salud bucal, Delta Dental recomienda seguir la regla “2-1-2”: cepillarse durante dos minutos, usar hilo dental por lo menos una vez al día y consultar al dentista para controles dos veces al año.
Delta Dental se compromete a brindar a los adultos mayores acceso constante y de calidad a la atención de la salud bucal, mejorar la educación e impulsar cambios duraderos en las políticas para abordar problemas sistémicos. Para obtener más información acerca de la encuesta, consulte el informe completo de Delta Dental y la ficha técnica.
Metodología:
La encuesta sobre salud bucal en personas mayores de Delta Dental refleja las opiniones de estadounidenses de 50 años o más y analiza cómo los estadounidenses mayores priorizan, acceden y piensan en su salud bucal y de qué manera eso afecta el modo en que se perciben a sí mismos. Delta Dental encargó a Atomik Research, una agencia independiente de investigación de mercado, una encuesta en línea a partir de una muestra a nivel nacional de 1,010 estadounidenses de 50 años de edad o más que fuera representativa de la composición de raza/origen étnico y género de la población de personas mayores en todo Estados Unidos. El margen de error es de +/- 3 puntos porcentuales con un intervalo de confianza del 95 por ciento. El trabajo de campo tuvo lugar del 24 de junio al 1 de julio de 2022.